La única compañía eléctrica privada de Georgia planea incrementar su capacidad en un 50% tras la aprobación unánime 5-0 de los reguladores estatales el viernes, para satisfacer la demanda proyectada de centros de datos. Esta expansión, una de las mayores en Estados Unidos, responde al voraz consumo eléctrico de la IA y podría impulsar las exportaciones energéticas europeas, beneficiando la economía española al reducir presiones sobre nuestra red eléctrica y fomentar inversiones en tecnología similar en España.